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Intro] (Cielo de mi cielo...) Si yo pudiera ser él… solo pa’ que tú me amaras a mí. En mis sueños te encontré, en mi alma te guardé, y aunque la vida me duela, aquí estoy… aún de pie. --- [Verso 1] Pienso en ti... como quien respira por costumbre, como quien ama sabiendo que no hay otra cumbre. Tú eres más que bella… eres milagro en carne viva, eres la razón por la que esta alma aún suspira. Si supieras cómo brillás en mi oscuridad, cómo tu nombre me salva de la soledad… Eres mi luna cuando no hay faros, mi abrigo en inviernos amargos. Yo te miro con ojos que no mienten, ojos que ven lo que otros no sienten. Y te amo, sin pedirte nada, solo verte feliz... ya paga mi alma entregada. --- [Coro] (x2) Déjame perderme en la eternidad de tus ojos, y encontrarme en lo profundo de tus labios rojos. Dormir sobre tu pecho, llorar si es preciso, y susurrarte al oído: “Sin ti, no tiene sentido”. --- [Verso 2] Te busco en las sombras, en los amaneceres fríos, en cada risa prestada, en los silencios vacíos. Mi alma grita por vos cuando no estás, porque solo vos sabés dónde mi paz está. Después del beso que no diste, yo sigo amando aunque no me viste. Te amo en silencio, te pienso en voz baja, te escribo con lágrimas en cada hoja. Eres mi todo, aunque no seas mía, mi verso más triste, mi mayor alegría. No es una canción, es mi confesión, cada línea sangra directo del corazón. --- [Puente] Llena de luz, llena de heridas que sanan, tu risa me salva, aunque a veces no me llamás. Con todo el amor que me cabe en el pecho, te pienso, te nombro… y me rompo derecho. --- [Coro] (x2) Déjame perderme en la eternidad de tus ojos, y encontrarme en lo profundo de tus labios rojos. Dormir sobre tu pecho, llorar si es preciso, y susurrarte al oído: “Sin ti, no tiene sentido”. --- [Outro] Cielo de mi cielo, dolor que bendigo, la musa que hizo de este loco un testigo. No hay verso sin vos, no hay noche sin tu rastro, si esto no es amor… entonces ¿qué carajo es esto? (Quie-ro per-derme en tus o-jos que duelen) (Y en lo hú-me-do de esos la-bios que vuelven) (Dor-mir en tu pecho, pa' ya no llorar) (De-cir-te al oído: jamás te voy a dejar) --- [Outro hablado – con voz rota, real, dolido] Yo nunca te he dejado de amar... y no lo voy a hacer, aunque me cueste la vida. Y si existe algo después de este mundo... ahí también te voy a seguir amando, aunque sea en silencio... aunque sea de lejos. Perdoná si esto llega tarde... pero es que vos siempre fuiste mi todo, y yo... yo solo fui un hombre con miedo a perderte.